Publicado en Polvo Acostada, boca arriba, miro fijo los movimientos circulares y suaves de la lámpara, alentados por el ventilador. Miro fijo y preparada, esperando que estire sus tentáculos. Siempre que presiento lo peor, sucede. No funciona a la inversa. Es como si pudiera controlar el futuro inmediato en reacciones solamente negativas hacia mi persona.Sigue leyendo «Mi sexo tentáculo»